¿Qué es una API y cómo puedes usarla para crear una app de tu empresa?

La tecnología permite que cualquier empresa pueda desarrollar su propia aplicación, sin necesidad de crear o incluso utilizar un lenguaje de programación. No se necesita más que una API para poder incorporar grandes soluciones tecnológicas en simples pasos a una aplicación o plataforma propia.

Sin duda, la tecnología hace todas estas funciones más accesibles. Una API permite incorporar una solución tecnológica de un tercero en una plataforma o aplicación, facilitando la comunicación entre ambos: cliente y servidor.

Gracias a esto, una empresa puede ofrecer una app con servicios digitales de un tercero, mediante su API y así ahorrar tiempo en el diseño y desarrollo de una aplicación. Si quieres aprender más sobre las APIs, sigue leyendo.

¿Qué es una API?

API son las siglas de Application Programming Interfaces, que significa interfaz de programación de aplicaciones.

Se define de esta manera a una solución tecnológica diseñada especialmente para comunicar aplicaciones de distintos proveedores en una sola plataforma.

¿Para qué sirve y cómo funciona una API?

Quizá sea más sencillo explicar para qué sirve una API, describiendo cuál sería la situación si estas no existieran.

Si tu empresa quisiera desarrollar una aplicación para brindar un servicio digital a sus clientes como, por ejemplo, reparto a domicilio, sería necesario contar con un equipo de programadores. Ellos, mediante un lenguaje de programación como JavaScript, Phyton o similar, crearían esta plataforma.

También se debería crear una plataforma que permitiera a los repartidores conocer la ruta más rápida para entregar los pedidos. Además de contar con una solución de seguridad que proteja la información de los clientes y prevenga el robo de datos.

Dado este panorama, es más sencillo entender para qué sirve una API en esencia: permite ahorrar todos estos pasos, ya que hoy en día conocemos muchas aplicaciones de diferentes proveedores que utilizan la misma solución, como por ejemplo, una plataforma de mapas. Esto es posible gracias a la API que permite que una aplicación de un cliente interactúe con el servidor de la empresa.

¿Cuáles son los tipos de API que existen?

Hoy en día, hay distintos tipos de API:

• API privadas: son soluciones tecnológicas propias de una empresa. Sirven para conectar plataformas desarrolladas en distintas áreas de la misma.

• API pública: son interfaces que podemos encontrar con diferentes proveedores, de pago y gratuitas, similares al software libre.

• API de socios: son interfaces con las que pueden interactuar los desarrolladores y programadores familiarizados con la tecnología.

• API compuesta: por último, está aquella API que es un conjunto de dos o más de las que mencionamos antes.

¿Cómo elegir una API para desarrollar una app empresarial?

Una de las principales problemáticas que experimentan las empresas al momento de recurrir a estas soluciones digitales es responder a la pregunta: ¿cuál será el estilo de API a utilizar?

Para encontrar la solución basta con entender y conocer los diferentes estilos de API existentes, que se diferencian por el protocolo de comunicación utilizado; estos son:

• API de SOAP: protocolo de acceso a objetos simples que permite el intercambio de información por medios estandarizados como XML, HTTP y SMTP.

• API de gRPC: es un protocolo que se puede ejecutar en cualquier entorno para realizar las conexiones entre cliente y servidor.

• API de EVENT DRIVEN: es ideal para permitir que las aplicaciones usen WebSocket y otras soluciones alternativas al HTTP.

• API de REST: protocolo de transferencia de estado representacional, por sus siglas en inglés; se enfocan en soluciones simples y centralizadas en el diseño de interfaces.

Lo recomendable es que, antes de elegir una API, la empresa debe determinar cuál línea de comunicación quiere mejorar y qué conjunto de protocolos interactúa de mejor manera con sus sistemas existentes.

En definitiva, una API brinda accesibilidad para que todas las empresas puedan añadir diferentes tipos de servicios y soluciones tecnológicas; tanto para mejorar procesos internos, como para ampliar los productos con sus clientes.