¿Es legal tener un mapache como mascota en Durango?

Los mapaches son mamíferos omnívoros que son fáciles de reconocer por su pelaje grisáceo, su característica máscara facial negra y los anillos en su cola. Miden entre 60 y 100 cm de longitud, incluida la cola, y son principalmente nocturnos.

En las redes sociales se ha glorificado mucho la adopción de estos animales salvajes para tenerlos como mascotas en hogares, por lo que han surgido bastantes preguntas sobre la legalidad de estas acciones en el país.

¿Es legal tener un mapache como mascota?

En México, la respuesta es que sí, es legal tener un mapache como mascota, pero con importantes condiciones. Los mapaches no están clasificados como especies en peligro de extinción, lo que permite su tenencia. Sin embargo, esto no implica que cualquier persona pueda simplemente tomar uno de su hábitat natural. Extraer un mapache de su entorno sin los permisos correspondientes es un delito y puede acarrear sanciones legales.

¿Qué se necesita?

Para adoptar un mapache, es necesario realizar un trámite ante la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) y obtener el permiso SEMARNAT-08-056.

Este proceso incluye la presentación de un plan de manejo que garantice el bienestar del animal y la seguridad de quienes lo rodean. Entre los requisitos se encuentran:

• Condiciones de vida adecuadas: El propietario debe ser capaz de proporcionar un entorno que imite, en la medida de lo posible, las condiciones naturales del mapache. 
• Evaluación de riesgo: El solicitante debe demostrar que cuenta con los conocimientos necesarios para manejar un animal salvaje, ya que los mapaches, aunque son atractivos, pueden ser impredecibles y potencialmente peligrosos.
• Cumplimiento de normativas: Además de obtener el permiso de SEMARNAT, el propietario debe cumplir con la Ley General de Vida Silvestre, que prohíbe la tenencia de especies exóticas sin las garantías necesarias para su bienestar.

¿Cuánto vive un mapache doméstico?

Cuando son cuidados adecuadamente en un entorno controlado, pueden vivir entre 10 y 15 años. Sin embargo, su longevidad puede verse afectada por factores como la alimentación, el cuidado veterinario y el ambiente en el que se encuentren. En su hábitat natural, su esperanza de vida es generalmente más corta, alrededor de 2 a 3 años, debido a depredadores y enfermedades.