¿Cuáles son las consecuencias por falsificar documentos oficiales en México?

Alterar una firma, inventar un acta de nacimiento o presentar una constancia falsa no son simples “trucos” administrativos. En México, la falsificación de documentos oficiales está tipificada como un delito grave y puede tener consecuencias legales importantes.

El Código Penal Federal establece sanciones claras para quien falsifique, modifique o haga uso indebido de documentos, tanto públicos como privados. Aquí te contamos qué dice la ley.

¿Qué sanciones establece la ley?

Todo depende del tipo de documento falsificado:

• Si es un documento público (como actas, credenciales oficiales o certificados), la pena puede ir de 4 a 8 años de prisión, además de una multa de hasta 360 días de salario.
• Si se trata de un documento privado, como un pagaré o contrato entre particulares, la sanción puede ser de 6 meses a 5 años de cárcel.
• En caso de que el responsable sea un servidor público, la pena se incrementa hasta en una mitad adicional.
• También es delito falsificar sellos, firmas, cuños o timbres oficiales; esto puede derivar en una condena de 4 a 9 años de prisión, con una multa de hasta 2 mil pesos.

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¿Qué actos se consideran como falsificación?

• Crear un documento completamente falso.
• Alterar información verdadera (como cambiar una fecha o nombre).
• Usar datos falsos en formularios oficiales.
• Imprimir, firmar o sellar documentos sin tener autorización.

Incluso si no creaste el documento, usar uno falso sabiendo que lo es también se castiga.

¿Por qué es tan delicado?

La falsificación no solo pone en riesgo trámites o beneficios indebidos. También daña la confianza institucional, genera incertidumbre jurídica y puede estar relacionada con fraudes mayores. Por eso, las penas buscan ser un freno efectivo a este tipo de acciones.