Funeral del papa Francisco reúne frente a frente a Trump y Zelenski en el Vaticano
En un inesperado gesto diplomático, el Vaticano logró sentar cara a cara a Donald Trump, presidente de Estados Unidos, y a Volodímir Zelenski, su homólogo ucraniano, en la basílica de San Pedro, mientras miles de fieles despedían al papa Francisco en la plaza.
Trump viajó a Roma para rendir homenaje al papa Francisco, quien falleció el pasado lunes 21 de abril, aunque sus intereses iban más allá del protocolo. Dentro de la basílica, se reencontró con Zelenski, quien llevaba días buscando una reunión para abordar temas clave, como el futuro de la guerra en Ucrania y acuerdos sobre recursos estratégicos.
El encuentro, realizado con discreción, quedó captado en una foto de ambos presidentes, con semblante serio, frente a frente en lujosas sillas púrpuras. Más tarde, un breve video difundido por Dan Scavino, asesor de Trump, mostró más detalles de la escena, en la que se lograron ver charlas rápidas, saludos con Emmanuel Macron, presidente de Francia, y la intervención del ministro británico Keir Starmer.
Aunque el Vaticano no habló su papel en este encuentro improvisado, facilitó el espacio y el momento. Trump, quien no se apegó al protocolo, desentonó con su traje azul en medio del funeral.
Luego del encuentro, Washington habló de una "reunión muy productiva" y Zelenski la calificó como "clave para la paz". El presidente ucraniano aseguró que hablaron de un alto el fuego total y de la posibilidad de un acuerdo que evite futuras guerras.
La jornada también permitió a Zelenski reunirse con Macron, Starmer y la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, quienes confirmaron su respaldo a los esfuerzos de Trump por lograr una paz justa. Meloni resumió la importancia del momento: “Ver a Trump y Zelenski hablando de paz en el funeral del 'Papa de la paz' tiene un enorme significado".
De regreso a Estados Unidos, Trump advirtió a Vladimir Putin de nuevas sanciones, dejando claro que, para él, la guerra no puede seguir.
Entre las autoridades presentes también estuvo Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, quien estrechó la mano de Trump y acordó seguir dialogando.