
Rostro. La joven futbolista forma parte de la Academia de Futbol Japón Durango, en donde ha brindado actuaciones destacadas.
El fútbol femenil duranguense encontró en Mariana Valles a una de sus figuras más prometedoras. Con apenas 11 años, la atacante se convirtió en la máxima goleadora del Campeonato Nacional Sub-11 de la Federación Mexicana de Futbol, celebrado en Puebla, donde además levantó el título con la Selección de Durango. Su registro de 14 anotaciones en el certamen la colocó como la artillera más letal de la competencia y confirmó el impacto de su talento a nivel nacional.
El camino de Valles en el torneo fue tan contundente como constante. Desde la fase de grupos mostró su capacidad para aparecer en los momentos clave, liderando la ofensiva duranguense con goles que marcaron diferencias. En los octavos de final, por ejemplo, firmó un doblete frente a Querétaro que aseguró el pase a la siguiente ronda. En la final, su anotación volvió a ser determinante para empatar el marcador y llevar a su equipo a la definición por penales, donde Durango terminó coronándose.
La joven futbolista forma parte de la Academia de Futbol Japón Durango, institución que ha sido semillero de varias generaciones y que ahora presume a Valles como su referente más reciente. Su estilo combina potencia y precisión, pero también una madurez poco común para su edad; sabe cuándo esperar, cómo perfilarse y en qué momento atacar el arco rival. Esa lectura de juego la ha convertido en pieza indispensable de su equipo.
El logro en Puebla no es un hecho aislado en su trayectoria. Un año antes, Mariana fue seleccionada para disputar la WCB 24 en España, torneo internacional donde dejó una grata impresión por su disciplina y mentalidad competitiva. Aquella experiencia le permitió medir su nivel frente a rivales de distintas latitudes y reforzó la confianza que ahora se refleja en sus actuaciones dentro del futbol mexicano.