La música es una de las sensaciones más profundas, donde el hombre derrama sus sentimientos por lo que vive, observa, respira y piensa, así Sergio Flores Martínez ofrece su talento, primero como un niño prodigio con su guitarra interpretando obras de los clásicos, y después plasmar páginas inolvidables en la historia del bolero.
Sergio interpretó obras de los inmortales Mozart y Beethoven, pero el impacto sería en los románticos del ayer y hoy prendidos en una época sin fin con Los Tecolines. Jorge abre el telón para permitir un vistazo a la fructífera obra artística de su hermano Sergio, de quien entreteje celosamente sus comentarios, su historia.
ASÍ EMPEZÓ A la edad de cinco años Sergio comenzó a tocar sus primeras notas en guitarra que le enseñaba su hermano Jorge. A la edad de siete años y después de haber estudiado bajo la dirección de Daniel Gárate y Paula Vda. de Camacho, Sergio debutó en el Teatro Lírico siendo apadrinado por el actor Roberto Soto (padre).
DÚO DINÁMICO Los hermanos Flores dieron diversos conciertos a dúo en la XEW, en la XEQ, en la sala Chopin, en el Teatro Lírico y en muchos recintos importantes más. Interpretando obras musicales como los valses: Sobre las Olas, de Juventino Rosas, Alejandra, vals Recuerdo, del ilustre duranguense y maestro Alberto M. Alvarado, Preludio, de Rachmaninoff, entre otras.
CONCIERTOS A los 11 años Sergio Flores ofreció como solista diversos recitales en la Sala Manuel M. Ponce, del Palacio de Bellas Artes; el 28 de febrero de 1947 dio un concierto interpretando obras de Albéniz, Mozart, Beethoven, Shubert, Tárrega y Granados, entre otros, elogiándolo la crítica por la sensibilidad y exquisitez con que interpreto Chacoone, de Johann Sebastian Bach.
En ese programa también se escuchó Minuette, de Mozart, Minuetto, de Shubert, Mallorca, de Albéniz, y Sevilla, del mismo compositor.
SORPRENDIÓ A LOS EXPERTOS En esa misma época se publicó una crítica en un diario, que decía así: "Sergio Flores tocó con seguridad muy superior a sus pocos años, y verdaderamente nunca hubiéramos juzgado posible esperar que lograra hacerlo mejor. Sus ejecuciones se distinguieron por la nitidez de sus armónicos, su excelente vibrato y su ataque firme y decisivo; tenemos que elogiar entusiastamente la actuación del concertista que revistió los caracteres de una gran excelencia, que dejo complacido al numeroso público".
FAMA TEMPRANA Gracias a su talento en el año de 1946 Sergio Flores fue invitado por el maestro Andrés Segovia a dar conciertos por Europa durante dos años y dar a conocer al niño prodigio de México; pero lamentablemente y por la corta edad de Sergio, sus padres no le autorizaron viajar.
EL PRIMER INTENTO Y como toda causa tiene un efecto, debido a la aceptación y gran talento musical en 1947 Sergio, virtuoso de la guitarra, en colaboración con su hermano Jorge, formaron un grupo musical interpretando temas rancheros en estilo bolero, en el cual ellos eran los arreglistas.
El grupo se formó por Ernesto Lazareno (tenor), Francisco Elizondo (barítono), haciendo Jorge Flores la tercera voz y armonía en la guitarra, mientras Sergio interpretaba magistralmente el requinto acústico. Dicho cuarteto fue apadrinado como Los Zenzontles por Antonio Flores Luna, padre de Sergio y Jorge, al paso de tres años se desintegra dicha agrupación, dando paso a que los hermanos Flores siguieran trabajando en el mismo proyecto para poder formar un grupo con un sonido propio que los distinguiera de entre los de esa época.
NACEN LOS TECOLINES En 1951 conocen a Luis de la Cruz Damián en La Lagunilla, ya que era empleado de la nevería donde don Antonio Flores compraba su nieve y en pláticas salió que Luis cantaba y que casualmente Sergio y Jorge buscaban voces para formar el grupo y sin más después de escuchar cantar a Luis lo invitan a formar parte del proyecto, posteriormente conocen a Antonio Velázquez, a quien invitan a formar parte.
LA PRIMERA FORMACIÓN De esta manera encuentran un estilo propio con Antonio Velázquez en la primera y segunda voz; Luis de la Cruz Damián, primera voz y tercera alta; siendo Jorge Flores segunda, tercera voz y armonía en la guitarra y Sergio Flores en el requinto y ambos en la dirección del grupo.
A partir de ese momento, México y Latinoamérica fueron testigos del nacimiento de una de las más legendarias agrupaciones románticas.
Continuará...