En Mazatlán, donde hasta un pobre se siente millonario y la vida se pasa sin llorar, razones de sobra las tienen con un hermoso mar y lugares paradisiacos como Huana Coa, paraje turístico que es un reto para los amantes del deporte extremo en que las emociaones ponen a la adrenalina al máximo.
A sólo 20 minutos de la Perla del Pacífico, por la carretera a Culiacán se localiza Huana Coa, hasta donde tuvimos la oportunidad de hacer un tour y constatar su organización, apreciar su infraestructura paseando a través de arneses de alta seguridad a una velocidad de 30 kilómetros por hora; hay quienes lo hacen a más.
Entre la selva están colocadas nueve líneas y 12 plataformas; visitantes de varios municipios de Sinaloa, Durango y la mayoría extranjeros toman su turno para ser equipados con todas las medidas de seguridad y personal profesional, previamente seleccionado y capacitado.
De hecho son un jefe de operación y 15 guías encargados de ofrecer pláticas, técnicas sencillas, para iniciar la gran aventura por alturas de 230 a 158 y hasta 300 metros.
Desde hace dos años Huanacoa recibe un número considerable de turistas de todas partes. Bueno, es nuestro turno y con cámara en mano vamos apreciando los momentos del deslizamiento por las líneas que atraviesan montañas y selva.
Cabe destacar que entre las medidas de seguridad para subir una escalera vertical, no se permite ingerir bebidas alcohólicas, las personas no deben tener padecimientos de epilepsia, Alzheimer, es decir quienes deseen vivir esta aventura deben estar bien de todas sus facultades físicas y mentales.
Luego del recorrido bajamos por rappel, volvemos a tocar piso, la adrenalina se mantiene, pero después de todo el reto es superado en Huana Coa.