Fantasmas de los famosos

Relatan cuidadores de teatros y estudios que distintos famosos vuelven a veces a sus lugares de trabajo y éxito.

Al filo de la lúgubre media noche del 2 de noviembre, las almas errantes regresan a este mundo tal vez deseosas de muestras de amor, y con un crujir de tablas, luces cintilantes y vientos gélidos que ponen la carne de gallina se hacen presentes, relataron en diferentes momentos cuidadores y veladores.

Los escenarios teatrales, estudios de grabación y de cine, y hasta en sus tumbas, muchos famosos como Negrete, Infante, Solís y El Indio Fernández no han entendido que su presencia ya no es de este plano terrenal y siguen recorriendo sus antiguos recintos de trabajo cantando y moviendo objetos.

XEW

Cuando el Sol se mete, dentro de los estudios Azul y Plata y Verde y Oro, de la legendaria XEW, relató en una ocasión Juan Pablo O’Farril, el que era operador técnico, escuchó claramente las voces de Jorge Negrete, El Doctor I.Q., Los Tariácuri, Alfonso Ortiz Tirado, Agustín Lara y Pedro Infante, grabando dos de los programas más viejos de la radiodifusora, como el Crisantemo o El Cochinito.

ESTUDIOS CHURUBUSCO

Dentro de los Estudios Churubusco hay un edificio con el nombre de Pedro Infante, y en altas horas de la noche los vigilantes han logrado escuchar claramente al cantante.

“Sólo lo he visto yo. Una vez una muchacha se quedó a dormir aquí y a ella le pasó lo mismo, y los técnicos que aquí trabajan cuentan que alguien juega con las luces sin estar ellos cerca”, dijo uno de los vigilantes.

Otra de las almas que, se dice, deambulan es la de Emilio El Indio Fernández, cuya sombra comentan que se puede ver claramente en los pasillos de lo que fuera su sitio de descanso y planeación.

EL BLANQUITA

Don Yuca, se dedicó al cuidado y aseo de varios teatros de la Ciudad de México, y muchas fueron vivencias terroríficas.

“Mucha gente dice que en el Teatro Blanquita espantan, pero yo creo que es la energía que se queda en cada temporada.

“Algunas veces se escuchaban voces y pláticas, pero a mí nunca me asustaron, nada de eso, yo digo que no existe y no le doy importancia”, señaló Don Yuca, aparentemente seguro, pero por momentos hace pensar otra cosa: “Alguna vez escuché en los camerinos, ya que yo subo seguido a ver si no hay nadie o que todo esté bien, ahí escuché un ruido que se parecía a un ronquido, pero luego se escuchó más fuerte y parecía un rugido. Yo solamente me acerqué, toqué la puerta para ver si había alguien y pues sí, nada, yo solamente apagué la luz y me bajé. Luego fui por el policía que cuidaba el lugar, a ellos no les gustaba subir a los camerinos porque les daba miedo, y bueno ese día cuando les avisé que escuchaba ruidos sí fueron, pero regresó pálido porque me dijo que no había nadie”, comentó Luis Chin, mejor conocido como Don Yuca.