A la baja, hectáreas de chile, manzana y algodón

En lo que va del presente siglo en Durango se han perdido mucha competitividad porque hoy en día más de la mitad de la superficie de siembras de ciertos cultivos que dejaban buenas ganancias a los productores, se han perdido; la manzana bajó el 71 por ciento de su volumen y el chile el 66 por ciento, por citar algunos.

De acuerdo a los datos con que cuentan en la subdelegación de agricultura de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), cada año, por diversas razones se están perdiendo hectáreas de siembras rentables.

El caso de la manzana es uno de los que más llaman la atención sobre todo porque al cierre del siglo pasado en la zona manzanera de Canatlán y Nuevo Ideal se tenían sembradas un total de 12 mil hectáreas.

En aquellos tiempos estas tierras arrojaban una producción de al menos un millón de rejas de manzana para, esa y dos millones de rejas de manzana para ripio y esta actividad dejaba una fuerte ganancia económica a los fruticultores que veían ene esta actividad una fuente importante de ingresos que a su vez reactivaban la economía de ambos municipios, el de Canatlán y el de Nuevo Ideal.

Pero pasaron diversos fenómenos que poco a poco fue disminuyendo el número de huertas que se dedicaban a esta actividad, primero que los árboles empezaron a hacerse viejos y por consiguiente ya no arrojaban la misma producción.

Los fruticultores en vez de sustituirlos y resembrar árboles nuevos y alternarlos con los que ya van de salida, dejaron los que tenían hasta que la producción ya no era negocio y no hubo otra alternativa que derrumbarlos y sembrar otro cultivo, entre ellos el frijol.

En otros casos algunas huertas, sobre todo en los años 2011 y 2012 la falta de agua provocó que se empezaran a secar y varios productores aprovechar el momento para echarlas abajo y buscar una siembra alternativa como el frijol o el maíz blanco.

Hoy en día se tienen sembradas alrededor de tres mil 500 hectáreas de manzana en ambos municipios, es decir una reducción del 71 por ciento por lo que de cada hectárea que se sembraba en el 2000, hoy en día solo quedan tres.

La producción también ha bajado, hoy si a los productores les va bien pueden alcanzar medio millón de rejas para mesa y medio millón de rejas para ripio.

EL CHILE DISMINUYÓ EN UN 66%

En cuanto a la producción del chile las cosas van por el mismo camino, a finales del siglo pasado se sembraban en todo el estado alrededor de nueve mil hectáreas siendo la región de Poanas y de Rodeo en donde se daba mucho esta cosecha.

Sin embargo, los factores climatológicos como granizadas empezaron a afectar este cultivo y poco a poco los productores fueron perdiendo interés en el mismo porque sembrarlo a cielo abierta no les rendía mucho y eran más susceptibles a los daños por el clima por lo que decidieron cambiar el cultivo, muchos la alternativa fue el frijol y otros el maíz.

Hoy en día se tienen sembradas alrededor de tres mil hectáreas de chile en todo el estado, aunque el año pasado se sembraron alrededor de dos mil por problemas con un virus que afectó este cultivo desde el año 2014.

Incluso, de acuerdo a Manuel Vargas, subdelegado de Agricultura de la Sagarpa, estados como Chihuahua y Zacatecas han avanzado más que Durango en la siembra de chile.

En este tema, señala el funcionario, hace falta apoyos en la tecnificación porque es necesario que se eleve el número de hectáreas con malla sombra o con macro túneles que protejan a este cultivo de granizadas.

EL SECTOR FORESTAL TAMBIÉN PIERDE

Pero no es solo estas dos actividades las que han perdido competitividad, existe otra que es de mucha importancia para el estado, la forestal en donde los productores han dejado de darle valor agregado a la madera y ahora prefieren venderla en rollo, así como sale del bosque se vende o cuando mucho hacen tablas.

Antes, comenta el funcionario, había más fábricas para construir muebles de madera, se le buscaba dar el valor agregado, hoy en día es mejor para el productor venderla en 'bruto' o en rollo como se le conoce.

 EN LA LAGUNA MELÓN, SANDÍA Y ALGODÓN

En municipios laguneros el melón y la sandía también han perdido volumen de hectáreas porque el precio que alcanzan estos frutos ha disminuido considerablemente.

El melón de Ceballos en el municipio de Tlahualilo se considera de los más sabrosos en el país por los grados 'britz' que dejan en esta fruta un sabor muy dulce, pero el precio es bajo y en varias ocasiones los productores decidieron tirarlo que venderlo a precios muy inferiores al costo de producción.

Pero no solo es melón y sandía, también el cultivo del algodón, que es el que dio origen a la Comarca Lagunera se ha visto reducido en cantidades significativas de hectáreas.

Hoy en día en aquella zona se siembran forrajes como el sorgo, avena y alfalfa, y en vez de ser zona algodonera ahora es lechera por ello ha ganado espacio estos cultivos para alimentar el ganado, aunque el algodón dejaba mejores ganancias.