Gordillo inicia arresto con convivio

Convencida de su inocencia, uno de los momentos más emotivos que vivió Elba Esther Gordillo Morales al llegar la madrugada de este sábado a su departamento en Polanco, -en donde cumplirá el arresto domiciliario declarado por un juez federal--, ocurrió al recordar a su hija Mónica Arriola Gordillo, quien falleció el año pasado, víctima de cáncer, de acuerdo con el testimonio de una persona cercana a la ex lideresa magisterial.

Al hablar sobre su situación legal, dijo que "ella no va a bajar la guardia hasta que se demuestre su inocencia, pues está convencida de que fue un abuso político".

"Hablamos de mil cosas, de los proyectos, de política, de mil cosas, y lo que trae la maestra como parte personal, pues es el recuerdo de su hija. Hubo un momento ahí personal en donde se vieron fotografías y fue algo muy íntimo y emotivo, se puso a llorar la maestra, abrazo a todo mundo", comentó la fuente.

Un par de horas fue lo que duró la convivencia de Gordillo con su familia, con su gente cercana y con sus abogados, tras haber sido trasladada a su penthouse desde un hospital sobre la Avenida de las Palmas a las 2:30 de la madrugada.

"Está feliz, traía un poquito arriba el azúcar, yo creo que por la emoción, se tomó un té, estuvo con la familia hasta las 5:30 de la mañana cuando terminamos de platicar".

Antes de retirarse a descansar pidió a sus abogados que pelearan para que se le quite el brazalete de localización que le fue colocado porque no la tiene nada contenta, se siente abusada, para una señora de su edad.

Sobre las medidas de seguridad, no se reveló la cantidad de elementos de la Procuraduría General de la República (PGR) y de la Policía Federal que custodiarán la vivienda, además de que se comentó que un juez ordenó que se cancelara una puerta blindada de uno de los dos elevadores con que cuenta el edificio y se asignó a una mujer policía para vigilarla las 24 horas.