Cuatro víctimas en choque con tráiler
En el kilómetro 12 de la supercarretera Durango-Mazatlán quedó partido el auto blanco en el que viajaba una familia, sólo la puerta izquierda del conductor parecía haber quedado intacta, no así sus cinco ocupantes; cuatro de ellos murieron en el lugar, uno esta hospitalizado.
Este fue el resultado fatal de un choque frontal entre el vehículo mencionado y un tráiler, desde luego la pesada unidad se impuso ante la fragilidad del coche familiar, que era de la marca Chrysler, tipo Stratus.
Eran las 07:00 de la mañana cuando las cuerpos de emergencia recibieron el llamado de auxilio, se reportó un choque en la supercarretera, a la altura de la entrada a la colonia Luz y Esperanza. Al llegar los elementos de socorros y corporaciones policiacas confirmaron que cuatro personas ya no estaban vivas, entre ellas una bebé de meses de edad.
El único sobreviviente de la familia fue un adulto de poco mas de 30 años de edad, trasladado al Hospital General 450. A él lo reconocieron como Andrés.
Las imágenes del accidente que despertó a los vecinos del norte de la ciudad, en la periferia, muestran lo fuerte del encontronazo; algunos curiosos incluso tomaron fotos o video mientras los bomberos municipales, la Policía Federal y Cruz Roja hacía cada quien su parte para rescatar cuerpos, identificarlos, y dar auxilio a quien lo requiriera.
IMPACTO BRUTAL
Sobre cómo ocurrió el siniestro, la Fiscalía General del Estado comunicó en un reporte que cuando la familia llegó al kilómetro 12+200, accidentalmente se impactaron contra el tráiler marca Kenworth, modelo 1992, color rojo; no precisó alguna causa. No obstante, el chofer de la unidad de carga que se identificó como Eduardo, de 45 años de edad, y originario del estado de Chihuahua, quien se encuentra detenido.
SALDO MORTAL
Los primeros minutos tras el choque se decía que entre los fallecidos se encontraban dos menores de edad, pero antes de las 11:00 de la mañana la Fiscalía aclaró la identidad de las víctimas: se trata de María Guadalupe Rodelo Luna, de 73 años de edad; María Cruz Graciano Rodela, de 53 años de edad; Nayeli Elizeth Villa Chávez, de 18 años, y una bebé, de cuatro meses de edad. Todas vivían en el poblado El Nayar, del municipio de Durango.