Tras la derrota de los persas en las "Guerras Médicas" por los griegos, en 477 a.C. se constituyó la Liga de Delos, algo así como la OTAN de la Grecia antigua. Varias ciudades temían un ataque de Persia y, administrada por Atenas, aglutinaron buques, guerreros y dinero en la Isla de Delos para asegurar su protección. En 454 a.C., Pericles; gobernante de Atenas, transfirió todo el tesoro a su ciudad, según él, para protegerlo mejor; además aumentó los impuestos. Lo cierto es que, con el dinero de otros; realizó la construcción de fastuosos edificios como La "Acrópolis; la ciudad de los mármoles para gloria de los dioses". En realidad, todo lo acumulado sólo sirvió para el engrandecimiento de Atenas; época a la que se conoció como "El Siglo de Oro", atribuida a Pericles. Las demás ciudades griegas se empobrecieron, por lo que se rebelaron y se convirtieron en enemigas de Atenas. Pericles cometió fraude al desviar recursos destinados a la defensa de las ciudades socios para embellecer a Atenas; Hoy ningún historiador honesto puede proponer a Pericles como ejemplo de político ético.
El 1 de septiembre de 1982, el priista José López Portillo, en su último informe presidencial, culpó, entre otros a los banqueros saca-dólares de la crisis económica del país. Usando las frases: "¡Ya nos saquearon! ¡No nos volverán a saquear!" nacionalizó la banca; jamás admitió tener él incumbencia alguna; insistió con aquello de que "Soy responsable del timón, pero no de la tormenta". Ante otra crisis económica en 1994, el también priista Carlos Salinas de Gortari que unos días antes había entregado la banda presidencia, culpó a "El error de diciembre" de una terrible devaluación del peso mexicano que afectó a muchos países; lo que se conoció como "Efecto Tequila". Entonces se utilizó el FOBAPROA, un sistema financiero creado en 1990, que todavía estamos pagando los mexicanos y que benefició a unos cuantos, entre ellos políticos que vemos ahora en los frentes electorales que buscan este año la presidencia de la república.
La corrupción es un término polisémico; incluye al fraude como una de sus diferentes manifestaciones; el cual se maneja como: "Engaño cometido en forma consciente con la intención de conseguir un beneficio, y con el cual personas, empresas y/o comunidades son perjudicados"
¿A qué se referían aquellos mandatarios cuando hablaban de "Saqueo" y "Error"? y ¿Cuál es la relación con el uso fraudulento del tesoro de Delos?
En los dos casos nacionales al hecho de que ciertas personas muy cercanas a los mandatarios recibieron "información privilegiada" de la crisis que ya estaba latente en nuestro país y se aprovecharon de ella para comprar dólares a precios muy bajos Y sacarlos del país. Ello urgía porque las cuentas pronto los convertirían en pesos. Así obtuvieron ganancias superlativas.
El uso de recursos de otros para apropiarse de ellos o para desviarlos a fines que no son los destinado originalmente, ha sido una práctica malévola de los políticos deshonestos a lo largo de la historia. Hoy en nuestro país y en Torreón tenemos dos ejemplos típicos, entre otros muchos.
Al tratar en esta columna el tema del Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México" no es si se va a hundir, si el lugar es adecuado; si es o no necesario o si existen otras opciones del mismo. Lo que sí se reprueba, es que al puro estilo pericliano, se utilizaron las afores de millones de mexicanos, sin su conocimiento y menos aún sin su consentimiento y autorización, para la construcción del mismo. Y, al mismo tiempo, relacionado con el otro matiz de esta columna, la fabulosa oportunidad que se dio al grupo Atraco-mucho, de obtener terrenos aledaños al mencionado nuevo aeropuerto, adquiridos a precios irrisorios, para crear ahí negocios majestuosos; todo ello gracias a la información privilegiada con que contaron y "a darle que es mole de olla" con terrenos federales y ejidales.
"Moreleando" es una agrupación ciudadana integrada por personas honestas y preocupadas por nuestra ciudad; realizaron labores maravillosas para restaurar el centro histórico de Torreón, y en particular, una rúa emblemática, la histórica "Morelos". Pero sus buenas intenciones fueron aprovechadas para sacar tajada de políticos corruptos de la administración municipal anterior, quienes, con información privilegiada, adquirieron propiedades casi abandonadas a un precio grotesco para convertirlas en antros, redituando también, lateralmente, con parte del material que se estaba utilizando en la remodelación para sus negocios particulares. Medrando además con licencias de alcoholes y comidas, sin pagar por ellas, al menos en un primer momento. Esto explica porque en Torreón, entre 2016 y 2017 un 70% de los negocios creados eran restaurantes y bares.
Claro que habrá quienes, sin faltarles cierto nivel de razonamiento político, al puro estilo porfirista de "Haga obras compadre" consideren esta situación como "aceptable". Esta argumentación, nace debido a la miopía de una auténtica ética política; se permite expoliar a personas y malversar el dinero público, con tal de que "se haga algo" y no todo sea solamente saqueo y desviaciones perversas para la ciudadanía.