
Concanaco avala reducción de la jornada laboral, pero con subsidio a horas extra
Al advertir que aplicar la reducción de la jornada laboral hubiera sido un alto riesgo para las empresas, la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo (Concanaco Servytur), consideró positivo que se haya avalado una reducción gradual y con certeza jurídica.
Se planteó que desde el origen del debate se advirtió que una reducción abrupta de la jornada laboral, sin medidas de acompañamiento, ponía en riesgo tanto a las empresas como a las personas trabajadoras.
“Hoy vemos que las preocupaciones de Concanaco Servytur y de las cámaras de comercio fueron escuchadas y se reflejan en la ruta de implementación presentada”, afirmó Octavio de la Torre, presidente del organismo.
Y es que, la reducción de la jornada se implementará hasta enero de 2027 y de manera gradual.
Asimismo, estableció que queda como un punto crítico pendiente el subsidio a las horas extra, por lo que aún falta este componente que se considera indispensable para lograr una reforma verdaderamente sostenible. “El sector puede pagar mejor a la persona trabajadora, pero no puede absorber más impuestos y costos laborales sin comprometer su operación”.
¿En qué consiste?
La Concanaco está pugnando por un subsidio a las horas extra a partir de la 41ª hora semanal, “como medida para compartir el costo entre empleadores y Estado, evitar impactos financieros irreversibles tras la eliminación del uso operativo de horas triples, incentivar la contratación y no castigarla con mayores cargas fiscales”.
Principalmente, piden que se apoye a las MiPyMEs inscritas en el IMSS, que representan más del 75 por ciento de los negocios formales del país.
“Si vamos a pagar mejor al trabajador, necesitamos también el respaldo fiscal del Estado. Una reforma sin subsidios puede terminar afectando a quienes pretende proteger: los negocios familiares”, advirtieron.
Canaco Durango
El presidente de la Cámara Nacional de Comercio (Canaco) Durango, Sergio Sánchez López, respaldó la posición nacional y subrayó que el subsidio a las horas extra es “la pieza faltante para evitar cierres, despidos y una informalidad creciente”.
Destacó que los comercios duranguenses, sobre todo pequeños y medianos, ya operan con altos costos energéticos, fiscales y de seguridad social, por lo que cualquier ajuste debe acompañarse de medidas que eviten “ahogar” al sector.
“El comercio quiere y puede pagar mejor, lo que no puede es cargar solo con toda la estructura de costos. El subsidio a la hora 41 no es un privilegio: es una medida de supervivencia para miles de negocios familiares”, puntualizó.